Publicado el 23 de julio de 2018 | por baligar202
0“LA EDUCACIÓN FÍSICA VISTA DESDE LA HISTORIA Y EL ARTE”
Datos del Proyecto
Descripción de la Experiencia
La búsqueda de un estado de dinamismo profesional y la conjunción de la Educación Física y la historia del arte, pueden considerarse como los principales argumentos para construir mi propuesta educativa. Las sesiones mantienen una estructura fácilmente apreciable. En un primer momento investigaremos y encontraremos información que sostenga el trabajo a desarrollar durante el resto del tiempo. En una segunda parte iniciaremos la reinterpretación de obras artísticas de cada época y por último practicaremos juegos, deportes y otras actividades propias de los distintos periodos históricos.
En la primera sesión construimos una línea del tiempo para que nos guiara en nuestro paseo por la historia. Tras investigar sobre las principales pinturas rupestres que aún perviven en nuestro país, las técnicas que se utilizaban para dibujar y el significado que para nuestros antepasados tenían, decidimos que nuestros conocimientos deberían materializarse y reprodujimos fielmente una pintura rupestre en el pasillo del colegio. (Para ello usamos carbón mineral, tizas, arcilla y témperas)
La parte motriz de nuestra primera sesión tuvo como protagonista el “Paleotraining” un método novedoso de entrenamiento que imita movimientos básicos que el ser humano usaba en la prehistoria y que nosotros adaptamos para realizar la fase de calentamiento. A continuación, expliqué la importancia que las danzas rituales tenían como expresión religiosa en la prehistoria y les reté para que improvisaran algunas usando argumentos como: pedir que la caza fuera provechosa, que alguien se sanase…
El salto a las antiguas civilizaciones fue inminente. Era el momento de que las arenas del desierto entrasen en nuestras zapatillas. Egipto nos da la bienvenida. Sus orígenes, sus monumentos y su religión nos aportan datos y curiosidades nada desdeñables.
La particular caligrafía de esta cultura nos facilita la base para plasmar en un papiro casero (que nosotros crearemos usando vendas, café, cola y papel) nuestros nombres y otros símbolos de su civilización.
Una vez bajamos al gimnasio, dimos rienda suelta a nuestra imaginación. Pudimos escapar de una momia que nos perseguía y confeccionamos una coreografía de “Tahtib” ( es el arte marcial egipcio más antiguo y cuya práctica se mantiene viva en su folclore popular ) en parejas para dar un final artístico y melódico a esta sesión.
Aterrizamos en la tercera sesión, donde nos esperan los creadores de uno de los eventos deportivos más importantes de todos los tiempos, los griegos. Sus valores y espíritu religioso hacia que para ellos el deporte fuese algo casi sagrado.
Investigamos sobre los orígenes del Olímpismo y descubrimos como sus ceramistas y escultores reproducían en sus obras cada una de las pruebas que constituían el movimiento olímpico de la época. Para continuar con este movimiento creativo, decidimos pintar nuestras propias cerámicas inspirándonos en las obras maestras del periodo clásico y reinterpretando sus creaciones.
Para cerrar la espiral olímpica nada mejor que practicar de forma adaptada algunas de sus modalidades más antiguas: La carrera, el salto de longitud, el lanzamiento de jabalina, el lanzamiento de disco y por último la lucha.
Nos pusimos las túnicas y paseamos por las calzadas de Roma, la capital del imperio. En nuestro recorrido observamos la magnitud de sus construcciones e investigamos sobre sus principales edificaciones públicas, sus funciones y los eventos que en ellos se albergaban. Nos detuvimos en sus eventos lúdicos/deportivos y dibujamos distintos tipos de gladiadores.
Cuando llegó el tiempo de jugar, recreamos situaciones de lucha coreografiadas entre pueriles gladiadores, después dimos paso a juegos de pelota y volvimos a la calma ayudándonos de juegos de manos como el “digitis micare” también conocido como la “morra”.
Las almenas de los castillos y los banderines medievales llenan nuestro horizonte con un mosaico multicolor que nos adentra en la Edad Media. Es el momento de conocer como la sociedad en el medievo se organiza jerárquicamente para disfrutar de privilegios. Para ello, sorteamos diferentes personajes entre el alumnado (rey, escudero/a, monjes, artesanas…) para que los alumnos/as pudieran descubrir qué roles desempeñaban en la sociedad medieval y a posteriori poder desarrollar una pequeña obra de teatro entre los mismos.
A continuación, ensimismados por las vidrieras de catedrales e iglesias, decidimos reproducirlas con ayuda de cartulinas y papel de seda.
La parte motriz se completó realizando justas con caballos humanos que buscaban la precisión entre los contrincantes. Ayudados de lanzas romas y con unos donuts de cartón enganchados en una caña les pediremos a los contendientes que inserten su “arma” en el donut antes que su oponente.
El presunto oscurantismo de la Edad Media dejó paso al color y a la libertad creativa de la Edad Moderna. De entre los numerosos autores que vivieron en esta época, centramos nuestra atención en la obra titulada “Juegos de Niños” de Brueghel el Viejo. En ella descubrimos más de ochenta juegos. Por grupos elegimos dos de ellos y los desarrollamos para poder exponerlos en la parte final de la sesión. A continuación, usando cartón y temperas reprodujimos varias obras famosas. (“Caballero de la mano en el pecho”, La Gioconda y “La dama del armiño”) En todas se recortó el rostro y esta zona fue ocupada por la cara de nuestros pequeños/as artistas. Ayudados de unas fichas, los alumnos/as explicaron por grupos los juegos elegidos del cuadro de Brueghel y por turnos fueron poniendo en práctica algunos de ellos.
Nos acercamos a nuestro presente y la Edad Contemporánea nos obliga a entender la naturaleza de obras actuales. Aprovechando que nuestro centro alberga otro proyecto Profundiza, planteamos una jornada de convivencia conjunta. En ella, no solo conocimos comidas de otras culturas, sino que también tuvimos la oportunidad de compartir las creaciones de ambos proyectos. Como colofón de la jornada, nos desplazamos a un taller de cerámica donde recibimos conocimientos sobre sus usos en distintos momentos de la historia. Después los niños/as crearon una obra contemporánea usando como base un pedazo de cerámica y para terminar algunos de ellos/as pudieron experimentar como se moldea la arcilla en un torno. Una tarde llena de historia, experiencias creativas y nuevas sensaciones.
La ilusión de los alumnos/as, sus preguntas, inquietudes y sus ganas de seguir, han sido el aliento necesario para finalizar este proyecto con la semilla del siguiente ya insertada en mi cabeza.
Imagen de Sandra Ollier en Unsplash
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